Amig@s queridos, hoy hablaré de otro tema que me agrada muchísimo: las series de televisión. En este posteo, rememoraré una que a pesar de los años sigue haciendo reír a mas de uno: FRIENDS. Para los que no la conocen (¡que pena!... ¡pero nunca es tarde!), Friends es una comedia televisiva que se estrenó en 1994 y concluyó en 2004. Narra la historia de un grupo de amigos que viven en Manhattan, Nueva York y nos introduce en los vaivenes respectivos a la amistad de estos jóvenes. Es sin duda una de las series mas geniales que la televisión pudo darnos. Es interesante volver a verla cuando ha transcurrido cierto tiempo, y descubrir que las graciosas conversaciones que suceden entre los chicos siguen siendo motivo de carcajadas hasta el día de hoy.
Debo decir que Friends, presenta a los amigos ideales y, me parece algo un tanto irreal en ciertos aspectos. Esto no es una crítica a la serie, para nada. Soy fan de Friends, pero me gustaría destacar las diferencias de los amigos Friends, con los amigos del vivir cotidiano. En uno de los capítulos de la afamada serie (no recuerdo si es el primero...) se puede ver a Rachel, quien lleva una vida de lujos mantenida por la tarjeta de crédito de su padre, discutiendo con sus amigos que insisten en que corte las tarjetas de crédito (literalmente con una tijera), luego de hacerlo, Mónica, le dice algo así como: "Bienvenida al mundo real, es un asco... te encantará..." Me pareció bárbaro. Creo que cada capítulo de Friends deja una enseñanza y me encanta ver como los chicos se apoyan y cooperan entre si. Debo concluir con mi crítica: "Ojalá existieran amigos así en el mundo real!"